martes, 13 de abril de 2010

Retrocon.

En los cómics es habitual encontrar el concepto "Retrocon" o "Retrocontinuidad", un fenómeno por el cual se ofrecen datos del pasado de un personaje que se desconocían por completo hasta entonces enlazándolos con una trama que se está desarrollando en el presente. Un giro molón, una ñapa, vamos. Recordemos la época en la que cualquier personaje de nuevo cuño tenía un oscuro pasado relacionado con Lobezno. La experiencia me ha enseñado que a la hora de escribir el historial de un personaje (lo que en ficción viene a ser el perfil), es conveniente no dejar su pasado totalmente cerrado. A veces es mejor proporcionar solamente los datos más básicos que definen al personaje y su dinámica con los demás y luego dejar que la escritura vaya llenando las lagunas. Puede que a la hora de escribir un episodio te venga bien que haya sido legionario, o que no sepa conducir, o que haya estado casado con una bailarina exótica... Esto no podríamos hacerlo si hubiéramos definido su pasado hasta el último detalle. Al público le gusta descubrir poco a poco a los personajes, y a Lost me remito, donde en los primeros episodios no sabemos prácticamente nada de los protagonistas y van dándonos píldoras de su pasado, e incluso momentos anteriores en los que varios personajes habían coincidido sin ellos saberlo. Lo del humo, el oso y el chino pesado de los videos son sólo adornos.


Espera, tu cara me suena. ¿Has ido a los Salesianos?

Si  llevamos este recurso a un juego de rol e hiciéramos lo mismo con el historial de un PJ, podríamos hacer que su vida fuera muchísimo más interesante y que estuviera llena de sorprendentes coincidencias como que la posadera de ese pueblo minero perdido entre las montañas sea una ex, o que al encontrar a esos marinos jugando a los dados se descubra como un ludópata rehabilitado, o que uno de los muertos vivientes que se abalanza sobre ellos sea un antiguo socio de cuya muerte fue directamente responsable. Siempre con la aprobación de Director y sin abusar, claro. El personaje dejando de ser un completo extraño cuyo pasado no le afecta en absoluto y pasa a estar mucho más integrado en el mundo y en la historia.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo. Qué pocas veces usamos este tipo de recurso...

Lato dijo...

me ofrezco voluntario para practicar conmigo todas esas guarradas.... me parece que ese tipo de cosas da vida al personaje...

Unai dijo...

Como curiosidad, la droga que borra la memoria en Torchwood se llama Retcon por esto :D

Felipin Skywalker dijo...

seria fantastico si todos los jugadores fueran novelistas...

...y nos asombraran cada vez k se las hacemos de GM's...

...a lo mejor la cosa no se trata de "k es lo k espero k sean mis jugadores nuevos"....si no k esforzarse por k mis jugadores sean lo más integrales posibles...

...y planificar paso a paso lo k se les enseñará y las cosas nuevas k agragaré sesión a sesión...

...igual como cuando a una persona se le enseña a leer...

...nuevamente....no todos nacen sabiendo...


saludos.

Verzobias dijo...

Yo a mis jugadores les pido que esbocen el pasado de sus PJs, noi que lo detallen.
Me dan una serie de ideas generales, y muchas de las veces las aprovecho para meterlas en la campaña que estén jugando. Así logro implicarles más.

Lobo de piedra dijo...

Me encanta la idea que propones. Algo parecido emplean las llamadas "partidas flasback" (o algo asi, era el concepto que traia el JdR "Hombre Lobo"). Partidas en las que se jugaba una parte del pasado del personaje (no recuerdo bien, pero supongo que ademas de modificar la ficha del prota habria que repartir Pjs acordes al entorno de este en el pasado para los jugadores). Uniendo ambos conceptos (el pasado sin determinar y el uso periodico de partidas flasback) podemos dar esa sensacion "Retrocon" tipo comics Marvel.

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