viernes, 7 de mayo de 2010

Ravenloft.

Acabo de terminar la lectura de "Ravenloft", el módulo de AD&D que originó toda una ambientación de terror gótico, la situada en el llamado "Semiplano del terror". Inquietudes que tiene uno. Quería saber qué tenía el módulo para haber sido capaz de generar todo lo que generó y me dejó un poco frío, la verdad, aunque supongo que habrá que verlo en su contexto, ya que el módulo en cuestion data de 1.983, ocho años antes de que Rein-Hagen hiciera de las suyas.Lejos de usar el terror como excusa para explorar la angustia existencial y lo mal que nos trata la vida y por qué están todos contra mí, Ravenloft tira por el camino del clasicismo y cuidado que viene el bicho y te come a bocados. La evocadora Barovia y el decrépito castillo de Ravenloft tienen una fuerte influencia de las películas de la Hammer, con su posada en la que todos los habituales callan de golpe cuando entran los forasteros, su pueblo de calles desiertas, bosques cubiertos de niebla, las enormes chimeneas y escalinatas, y los grandes espacios inhabitados porque nada da más miedo que la soledad.

Por problemas de derechos, le llamaremos:
"El vampiro anteriormente conocido como Drácula".

El AD&D (o D&D en cualquiera de sus encarnaciones) no es precisamente el mejor sistema para ambientaciones de terror, y menos todavía cuando los jugadores pueden seguir siendo enanos, medianos, magos, y otras excentricidades que quedan bastante fuera de lugar cuando intentas dar miedito. Nada que no se pueda solucionar prohibiendo cosas a los jugadores, pero aun así...

El argumento de "Ravenloft" es de lo más sencillo: los personajes deben destruir al Conde Strahd Von Zarovich (Drácula, para entendernos). Y no hay opción, los personajes están atrapados en el reino de Barovia por culpa de unas extrañas nieblas que no se disiparán hasta que el Conde no la haya diñado. A pesar de este planteamiento tan soso hay que reconocer que introduce refrescantes novedades, por una parte, los mapas dibujados en perspectiva isométrica, más propia del dibujo técnico, dando más importancia a la tercera dimensión, con las escaleras, torres, tejados, subidas, bajadas y balcones ocupando protagonismo en el desplazamiento por el castillo Ravenloft. Por otra, el desarrollo de la aventura se ve fuertemente determinado por una tirada de cartas que hace una pitonisa gitana (algo que recientemente hizo Chupi-Paizo en el Adventure Path  "Curse of the Crimson Throne", con la salvedad de que ahí las cartas sólo otorgaban bonificadores en determinadas escenas). La lectura determina dónde descansa Strahd, cuáles son sus objetivos y otros detalles fundamentales de la aventura. Pues bien, con la lectura de cartas, la ficha del villano y el mapa del castillo, tira millas. No hay más, asi que supongo que habría que jugarla para poder comprobar la eficacia de la propuesta.

Si no quieres clichés, toma dos tazas. Y un muslaco.

En este link: podéis descargar de forma gratuita la segunda parte de Ravenloft, "The House on Gryphon Hill", que vuelve a juguetear con algunas mecánicas interesantes e introduce, además de las lecturas de cartas, un sistema de hipnosis. Merece la pena echarle un ojo. Y para más información también tenéis el blog de Ravenloft, con mucho material en la bella lengua de Cervantes. Estáis tardando.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo tambien la lei y es cierto hay que mirar el merito del contexto. similar sensacion me paso cuando lei la clasica "Dracula" de Bram Stoker, estaba bien pero no me parecia lo mejor del genero; pero claro es la semilla de lo cual surgio todo despues

El Guardian dijo...

Ravenloft engloba muchisimos titulos de la literatura gotico/romantica. Dracula caracterizo especialmente la aventura original y el dominio de "Barovia".

Es un gran entorno de campaña, muy diferente a los "camina, pega, lotea" (con sus diferentes matices) que nos tenia acostumbrados D&D. Lo malo es que es demasiado diferente para que calara en los mas tradicionales, ademas el propio sistema en el que se basa es contrario a su filosofia de juego.

doclusifer dijo...

Debo reconocer que mi aversión a AD&D me hizo despreciar la ambientación, siendo fan de las pelis de la hammer, al final caí y me gusto, no es para tiara cohetes, vamos pero a mi entender es bastante entretenido( esta muy por encima de Dark Sun), aunque después de de la era mundo de tinieblas, le perdí el rastro.

Lato dijo...

yo creo que estas cosas hay que jugarlas en la epoca y con la edad correcta... a mi me encantaria incarle el diente, pero la partda, conocienco al resto de mis compañeros de juego habituales iba a ser un descojone....

doclusifer dijo...

Joder Lato, pues pa echarse unas risas, que nunca biene mal.

Max-Steel dijo...

La ambientación de Ravenloft siempre me gustó pero las mecánicas extra del juego (maldiciones y demás) nunca me gustaron.

El Guardian dijo...

Son precisamente las mecánicas lo que hacen el entorno de campañana tan especial, ya que apoyan la ambientación con reglas temáticas.

Una de las cosas que mas se quejan los detractores de Ravenloft son la elevada dificultad de los encuentros, unas reglas muy duras contra los pjs y la escasez de objetos mágicos...sin contar los malditos. Pero soy de los que piensan que estas cosas son positivas y diferenciadoras, no hay que ser tan blandos!

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