Siguiendo con mi tendencia de recuperar viejas glorias de la caja de miniaturas difuntas decidí meterle mano a una de las primeras que pinté, calculo que allá por el año 91: un squat del Caos. Cuando mis amigos y yo empezamos a meternos en el mundillo de Warhammer 40.000 yo elegí la facción de los squats porque tengo muy buen ojo, y me centré además en los del Caos. Me dije: "Estos tienen futuro, no los marines, que son un rollo". Para el Fantasy los que me gustaban eran los fimir. Es un don que tengo. En Warmachine me hice los Skorne para ser competitivo. Total, que la miniatura se encontraba en estas condiciones:
Vapuleado, con la pintura descascarillada, la peana sin rellenar, porque cuando yo era joven no teníamos dinero para relleno, y un brazo desaparecido. Como veis, en aquellos años el pincel seco era el summun de la técnica pictórica.
Lo primero que hice fue meterla en acetona y buscar brazo para el muchacho. Lo de modelar algo queda totalmente fuera de mis posibilidades. Parecía una misión imposible, pero no hay nada que no se encuentre en internet. Si acaso decencia. Tirando de Google di con la marca francesa Uscarl Miniatures (¡ENLACE!), que resulta que no solo hacen brazos y armas de metal para squats, sino que además tienen unos cuantos esculpidos por Kev Adams para poder ampliar tu ejército. ¿Veis como tenían futuro? Yo creo los brazos son un pelín grandes, pero teniendo en cuenta de que se trata de un squat del Caos, se puede justificar la desproporción. Movidas del Caos.
Así quedó el muchacho tras el trabajo de chapa. A la hora de pintarlo elegí los colores del uniforme tradicional squat (rojo, verde y amarillo). A juzgar por la pinza supuse que su corrupción derivaba de Slaanesh y le hice la piel, la pinza y la barba en morados, así como las sombras de los otros colores.
Las fotos, como siempre, una mierda. Yo creo que hasta son mejores las del "Antes". ¿Aprenderé alguna vez a hacer buenas fotos? No.